Sagunt prepara cambios en su bus urbano tras otro año de récord

Las cuatro líneas de transporte público registran en los cinco primeros meses del año más viajeros que en todo 2019, después de un 2024 con un promedio superior a los 100.000 mensuales

Las bonificaciones impulsan un crecimiento exponencial, que no acaba de convencer a algunos expertos del sector

La primera parada en dirección a Sagunt de la línea LD.

La primera parada en dirección a Sagunt de la línea LD. / Daniel Tortajada

Sagunt

Más de 113.500 al mes. Ese es el promedio de viajeros que ha alcanzado el servicio de autobús urbano de Sagunt durante los primeros cinco meses de este año. Estos cerca de 570.000 s de las líneas LD, C1, C2 y Bus Nit ya superan a los registrados durante todo 2019 (casi 545.000), 2020 (menos de 350.000) o 2021 (por debajo de los 450.000), según los datos facilitados por la concejalía de Movilidad Urbana de Sagunt.

Después de coger velocidad en 2022 y rozar el millón de viajeros un año después, en 2024 se rebasaron los 1.250.000 viajeros, que supusieron un 131 % más que cinco años antes y el despegue definitivo de un servicio que el ayuntamiento celebra que alcance estos niveles de uso, pero también es consciente de que «hay un amplio margen de mejora». 

Así lo reconoce el delegado del área, Javier Raro, en palabras a Levante-EMV, en las que también adelanta que «estamos revaluando las necesidades a partir de datos actualizados, para la redacción de un nuevo proyecto del servicio que atienda las demandas y conecte eficientemente los núcleos de Sagunto, Puerto de Sagunto, Almardà, Corinto y Malvarrosa, además de los polígonos».

Crecimiento "insostenible"

Y es que, desde el sector del transporte público, se reconoce que estos crecimientos en el uso bus urbano «son exponenciales e insostenibles». Uno de los nuevos hábitos que se ha detectado, como consecuencia de las bonificaciones, en algunos casos hasta la gratuidad, del billete es que «hay viajeros que suben para tres paradas y ocupan el sitio para otros que van más lejos. Al final, los autobuses no son infinitos».

Con ocho vehículos y 16 conductores adscritos a este servicio, Raro apunta que «nuestra ciudad crece a un ritmo superior a los 1.000 habitantes anuales y eso plantea nuevos retos. Tenemos presente -insiste el concejal de Movilidad Urbana- que se producen situaciones puntuales de mucha afluencia de viajeros y viajeras, pero estamos tratando de dar respuesta con refuerzos y trabajando para que, en 2026, tengamos ese nuevo contrato de autobús urbano que mejore las prestaciones».

Viajeros por líneas

Entre la información preliminar de la que ya se dispone destaca que la línea estrella es la LD, con más del 80 % de los viajeros de este año. Por detrás se quedan la C1 (9 %) y la C2 (7 %), mientas que el Bus Nit ha registrado en este tiempo algo más de 4.200 s (0,7 %). Otras características del servicio apuntan como paradas estrella tanto la estación de Renfe como los institutos en los días lectivos, además de la playa en verano.

Parada del autobús urbano de Sagunt.

Parada del autobús urbano de Sagunt. / Daniel Tortajada

Con el foco más puesto en las graves carencias de la conexión con València, Raro apunta que «del mismo modo que estamos recogiendo las incidencias en ese servicio para trasladárselas a la Autoridad de Transporte Metropolitano de València, animamos a la ciudadanía a que nos informe de las anomalías en el autobús urbano o cualquier situación que convenga atender».

Apuesta por la movilidad sostenible

De esta forma, el socialista reivindica que «hemos hecho y lo seguimos haciendo una importante apuesta por reforzar la movilidad sostenible, con ajustes de rutas y horario, además de rebajas en las tarifas». Los resultados han sido «positivos», porque los datos demuestran «la importante adhesión de la ciudadanía al autobús público», algo que va en la línea de «nuestra voluntad de que el transporte urbano se convierta en una alternativa real al vehículo privado para los desplazamientos en el municipio».

Nueva línea C3

En este objetivo, la intención es que también a partir del próximo año se ponga en funcionamiento una línea, que ya está ideada como C3, para conectar los núcleos urbanos con los polígonos industriales.

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