Frente común para que la Romería de Sant Pere de Catarroja sea declarada Fiesta de Interés Turístico Local

El Ayuntamiento de Catarroja ha aprobado en el pleno de mayo su adhesión a la petición de los festeros y festeras de Sant Pere para que la Romería de Sant Pere al Puerto sea reconocida como Fiesta de Interés Turístico Local, un paso hacia el reconocimiento institucional de una tradición viva y estimada que forma parte de la esencia del barrio Les Barraques y de todo un pueblo desde 1957.

“Esta fiesta no solo rinde homenaje a nuestro pasado pesquero, sino que también fortalece el vínculo entre el pueblo y su entorno natural. Es una expresión viva de nuestra identidad que merece ser reconocida, ahora más que nunca”, ha destacado la alcaldesa, Lorena Silvent.

Los festeros y festeras de Sant Pere 2025 han querido impulsar esta propuesta como muestra de aprecio por el patrón del barrio, su patrimonio y sus raíces. "Todo surgió en la primera reunión que hicimos los Festeros de este año y a partir de este momento nos pusimos manos a la obra", explica la Festera Mayor 2025, Sole Perales. "Es cierto que la dana nos paralizó e hizo que mucha gente del barrio con quién habíamos ado que tenía libretos antiguos y fotografías, lo perdiera todo".

La romería, que tendrá lugar el próximo 22 de junio, es el acto más simbólico dentro de las Fiestas de Sant Pere del barrio de Les Barraques, un barrio históricamente vinculado a la pesca y a la Albufera. A pesar de tener un origen de barrio, es una celebración arraigada en toda Catarroja, que enlaza el vecindario con su entorno natural: el Puerto, la gran joya natural del municipio.

Un acto que une generaciones

Se trata de una festividad con más de 65 años de historia. “Desde 1957, año de la barrancada”, apunta la Festera Mayor 2025. “Dicen los viejos que dijeron en aquel momento que a Sant Pere le había gustado tanto la Albufera que hizo que la Albufera viniera a él”.

Con sus orígenes en las antiguas misas que los pescadores celebraban para proteger las barcas, la Romería de Sant Pere ha conservado su espíritu. Empieza a las 8 de la mañana con la bajada del santo desde la iglesia de San Miquel, pasa por las calles del barrio de Les Barraques, y finaliza en una misa en medio de la Albufera, donde las barcas rodean la imagen del santo en una escena emotiva.

La antigua anda con forma de barca, que sobrevivió las riadas de 1936, 1957 y 2024, es portada a hombro por los festeros hasta el Puerto. Allí, después de un almuerzo popular, centenares de vecinos y vecinas, festeros, damas, autoridades y turistas embarcan hacia el centro de la Albufera, acompañados de música, tradición y alegría.

El acto culmina con una bendición del lago, el pescado y el arroz y con palabras de agradecimiento al patrón de Les Barraques, Sant Pere, símbolo de protección y de continuidad cultural para las familias del barrio y de todo el pueblo.

“Como nieta de pescadores y barraquera, por supuesto cualquier reconocimiento a la fiesta de mis antepasados para que continúe y no se pierda la tradición me plena de emoción. Creo que todos los Festeros de 2025 guardaremos esto en nuestro corazón para siempre. Queremos invitar a la gente a que conozca esta maravillosa tradición el próximo 22 de junio”.

Catarroja: patrimonio festivo

Este reconocimiento a la Romería de Sant Pere se uniría al ya otorgado en las Fiestas de Moros y Cristianos de Catarroja, que fueron declaradas Fiesta de Interés Turístico Provincial de la Comuniat Valenciana en 2024, y consolidaría la apuesta del municipio para poner en valor sus celebraciones más arraigadas. Además, Catarroja también cuenta con referentes gastronómicos tan identitarios como el Concurso Internacional de Allipebre, una cita anual con gran repercusión y aprecio popular, vinculada al Puerto y a la tradición culinaria de la Albufera, declarada Fiesta de Interés Turístico Autonómico en 2022.

Con esta solicitud, Catarroja quiere consolidar su apuesta por la cultura viva, la memoria colectiva y el respeto por el territorio. “La Romería de Sant Pere, como parte fundamental de las fiestas patronales del barrio más antiguo de la ciudad merece este reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Local por su singularidad, continuidad y arraigo popular”, concluye la alcaldesa Lorena Silvent.